1-¿A qué edad empezaste a escribir y
a publicar? ¿Cuándo decidiste que serías escritora?
-Empecé a escribir a los cuarenta años, aunque la poesía la
llevaba dentro de mí, y mi primer libro vio la luz a mis cuarenta y cuatro.
¿Cuándo decidí ser escritora? Yo no lo decidí. Sencillamente fue la poesía la
que me secuestró y en ella, a pesar de los desplantes que me hace, encontré la
libertad.
2- ¿Qué significa ser la esposa de un
pintor como Ignacio Ipiña?, ¿te sentías a la sombra de él?, ¿te tenía como musa
o motivo de inspiración de sus cuadros?
-Era un gran pintor y un gran lector. Me enseñó a amar el
silencio. El silencio creativo. Y yo lo encontré por medio de la palabra. Nunca
me sentí en la sombra. Y más bien fue él quien me inspiró a mí.
3- Empezaste a escribir en el taller
de Ramiro Pinilla. ¿Cómo fue tu experiencia con él. ¿Guardas buen recuerdo del
escritor? ¿Cómo le conociste?
Nadie puede enseñarte a escribir porque cada cual elige su
camino. Pero sí pueden decirte por dónde vas a caerte. Ramiro, y todo el grupo,
decíamos lo que pensábamos ante la lectura de un poema. Criticando a los demás
aprendes a criticarte a ti mismo. Y eso a veces requiere una buena dosis de
humildad. Ramiro fue un amigo grande en mi vida, por su honestidad y su
sinceridad.
4- ¿Has pensado alguna vez dar
talleres o clases de literatura?
-No. Sería un desastre como profesora. Hay pocas personas que
sepan admitir una crítica sincera. Aunque pienso que se puede aprender como
profesor y como alumno. Todos tenemos algo que decir.
5- ¿Qué piensas del panorama de la
poesía actualmente en España y las nuevas generaciones?
-Salvo honrosas excepciones, bastante
numerosas afortunadamente, hay un consumo poético que poco tiene que ver con la
poesía. Pero eso pasa en todas las edades. Esa pequeña reserva de gente joven
que vive por encima de ese consumo puede ser la esperanza.
6- ¿Qué piensas de la buena y mala
literatura en general y en España, de los best sellers (novela negra, histórica
y libros de auto ayuda)?
-Sencillamente,
la mala, no es literatura. Y los best sellers digamos que los miro de lejos. Me
reservo el beneficio de la duda.
7- ¿A qué movimiento, generación o
corriente crees que pertenecen tus poemas?
-No tengo ni
idea. Escribo sobre lo que me quema por dentro y aspiro a ser poeta. Pero no es
un título académico.
8- ¿Cultivas el verso libre, el
soneto, la poesía rimada…? ¿Qué recursos estilísticos son los que más abundan
en tus poemas?
-Me expreso
en la música del verso libre y quiero pensar que lo adorno de metáforas. Una
idea dispara mucho más lejos reflejada en imágenes que la consolidan.
9- ¿Qué autores son para ti de
cabecera? ¿Qué obras te gustan, y cuáles te han influenciado?
-Dependiendo
del momento en que vivas, todos evolucionamos, te inclinas hacia distintos autores.
Antonio Machado y su profundidad. La integridad de José Ángel Valente. La
ironía de Ángel González y Gil de Biedma. La elegancia de Gerardo Diego. El
surrealismo de Juan Larrea…
10- ¿Mantienes relación con otros
escritores? ¿Cómo se relaciona ahora un escritor con otro? ¿El café Gijón, el
Facebook, email, whassap…?
-Para mí no
hay como una conversación mirándote a los ojos. La informática ayuda, por
supuesto, pero no es la panacea. Ramiro Pinilla solía decir: no quieras conocer
a un escritor cuando te gusta su obra, igual te decepcionas. En su caso, no me
decepcionó en absoluto.
11- ¿Eres caótica o disciplinada
escribiendo? ¿Te dejas llevar y luego corriges? ¿Dónde te pilla la inspiración?
-“La poesía
llega como un ladrón a la casa del crimen. Ahí está. Viene porque
la he llamado yo”, decía León Felipe. Llega mandando. Pero eso le pasaba a él,
los demás tenemos que suplicarle más que se deje ver, es decir, necesitamos una
disciplina mínima. ¿Qué si corrijo? Un poema no está terminado nunca. Una vez publicado,
que ya no tiene remedio, sigues descubriendo errores.
12- ¿Qué te lleva a elegir los temas
que tratas en la poesía? Por ejemplo, el
arquetipo de don Quijote.
-Escribo
sobre las cosas que enseña la vida, y que siga enseñándome por mucho tiempo. En
concreto, don Quijote y Sancho, Sancho y don Quijote- qué sería del uno sin el
otro-, me ayudan a entender que la vida es un baciyelmo. Tiene mucho de bacía,
la palangana de barbero que don Quijote llevaba a guisa de casco. Pero también
tiene yelmos, momentos de creatividad, de alegría, de locura -que en pequeñas
dosis es necesaria-, de sorpresas agradables que nos llegan. Sólo hay que saber
verlos.
13- Definirías tu obra como evasiva o
con conciencia social? ¿Escribes poesía social o experimental o estilista o
surrealista?
-Un poema no
puede conformarse con la estética. Tiene que decir algo, revolvernos por
dentro, cuestionarnos algo. La poesía florero se muere de aburrimiento. Por lo
menos a mí se me muere.
14- ¿Estás más cómoda en la fantasía
o en la realidad?
-Pienso que
hay que buscar la fantasía que subyace en la realidad, para a veces poder
soportarla. Hace mucho me uní a Unamuno que pedía voluntarios para ir en busca
del sepulcro de don Quijote, y recuperar el yelmo.
15- ¿Cómo te definirías
políticamente?
-Digamos que
practico el agnosticismo político. Como dice un amigo mío: “Yo no quiero a los
pueblos, quiero a las personas”, y acepto que piensen como quieran. Creo que es
la mejor manera de entendernos. Siempre que también sepan escuchar, claro.
16- ¿Qué piensas ahora de los
mileuristas? Antes nos indignábamos por tener mil euros y ahora nos peleamos
por tener 300.
-Es una
forma de paro encubierto.
17- ¿Qué causas sociales te parecen
más importantes para abanderar? ¿Te consideras feminista, anti-taurina,
ecologista, vegana, a favor de los derechos de los gays?
-Por este
orden: totalmente a favor de los derechos de los gays, feminista sin carné,
ecologista -aunque somos unos hipócritas porque todos, de una manera u otra
mancillamos a la naturaleza- anti taurina. Vegana no, por favor, con todos mis
respetos.
18- ¿En tus poemas hay rasgos
autobiográficos?
-Eso es
inevitable. Todos escribimos de lo que llevamos por dentro.
19- ¿Crees que un escritor tiene que
publicitarse en la Tv, colaborar en medios de radio, contestar llamadas de
teléfono en concursos o programas solidarios, o te parece todo esto un circo
mediático? ¿Dónde acaba la responsabilidad social o el compromiso del escritor
y dónde empieza el negocio? ¿Te gustan las actividades “extraliterarias” como
ir a presentaciones, conferencias etc…?
-Más bien un
círculo mediático. En el caso de la poesía, salvo en contadísimas excepciones,
es imposible hablar de negocio. La poesía no da ni para merendar. Y es mejor
así. Porque es imposible que interese en esta sociedad de cartón-piedra.
Estaríamos fallando nosotros.
20- ¿No has pensado en tener un blog?
- Pues no.
Bastante tengo con los email y los whassap. Tengo un contencioso con la
informática.
21- ¿Qué piensas de internet y del
ordenador que ha cambiado el mundo literario? ¿Consideras internet, la wiki y
el book un logro o un retroceso? ¿Y qué te parece la piratería?
-Toda la
informática me parece un avance extraordinario. Pero empleándolo en su justa
medida. Es un medio, no un fin. En el metro, casi todo el mundo va trajinando
en su móvil, y no mira al que viaja enfrente. Y aún peor, practicando en una
playa sin fijarse en el lenguaje de las olas, o en el testimonio de un monte.
Al final, ¿seremos como máquinas?, ¿Dónde queda el vuelo de un pájaro? Y la
piratería es eso, lo que su nombre indica: piratería.
22- ¿Qué consejos darías a un poeta
novel? ¿Has leído muchos poemarios primeros? ¿La gente te pide consejo?
-No soy
quién para dar consejos porque yo también tengo mis fallos. Igual pediría que
no adjetiven tanto, me lo digo también a mí. Hay que dejar la jaula del poema
abierta para que pueda acabarlo quien lo lea, y luego dejarle volar. Como la
caja que guarda el cordero que todos soñamos, el dibujo que le entrega
impaciente el piloto a “El Principito”, ese maravilloso cuento de Saint Exupery
donde nos pone a caldo a las personas adultas.
23- ¿Qué piensas de la mujer y del
feminismo?
-Que sigue
siendo necesario. Hoy a los niños hay que educarles en la igualdad desde
pequeños.
24- ¿Qué te parece la novela “Patria”
de Aramburu? ¿Iba siendo hora de tratar el tema del terrorismo en literatura?
-Tiene que
quedar como testimonio de lo que pasó. De la misma forma que otros puedan dar
también su versión. Sencillamente para no repetir la historia.
25- ¿Cómo te sientes contando con
éxito de público y de crítica? ¿Te gusta recibir premios?
-¿Y a quién
no? Desde el momento que te presentas a un concurso es que te ilusiona ganarlo.
Un premio es un acicate para continuar, y también una responsabilidad. Pero las
críticas hay que recibirlas con precaución, aunque sean favorables. Nadie
llegamos a las palabras hasta la profundidad que quisiéramos.
26- Película
y grupo de música y ciudad preferida. Filósofo de cabecera. Mi
ciudad es Bilbao, donde nací y vivo. Sabe todos mis secretos. Mi música la
clásica, que ya ha pasado por la criba de los años. Pero también toda la que
tenga calidad. Hace poco escuché un rap con una letra fenomenal. Y me quedé
colgada de ella. Sólo me faltaba la visera puesta al revés… Mi libro de
cabecera varía, afortunadamente, porque quiere decir que sigo renovándome por
dentro, a pesar de las brasas de la edad.
Blanca
Sarasua
muchas gracias por tu tiempo y tus respuestas
